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Beber vino blanco o rosado con calor parece que apetece más. No es algo que a todo el mundo le pase pero la mayoría de wine lovers con los que hemos hablado así lo afirman.
El vino blanco o los vinos rosados han dejado hace tiempo de ser una bebida exclusivamente estacional. Lo que si es cierto es que con la llegada del sol, la primavera y sobre todo el verano, este tipo de vinos alcanza los mayores picos de consumo.
Como todo, tiene una explicación, ¿Quieres saber por qué?
Beber vino blanco o rosado cuando hace calor
Suben las temperaturas y ¿quién se resiste a tomarse un blanquito en una terraza?
Cuando suben las temperaturas el cuerpo nos pide bebidas frías y es éste el principal motivo por el cual optamos por pedir un vino blanco o incluso un rosado o clarete.
Estos vinos se sirven a una temperatura más baja. Los vinos blancos se deben servir entre 7 y 10 grados y los rosados entre 8 y 12. Esto supone dejar a un lado los hasta 18 grados que puede alcanzar al servirse un tinto en caso de ser Gran Reserva.
La diferencia es muy evidente y cuando estamos intentando combatir el calor, nuestra mente pide un vino que se sirva frío.
Punto y aparte recibe el hecho de muchos bares que sirven estos vinos en copas congeladas. Nunca se debe hacer esto ya que el vino va a perder las propiedades organolépticas.
¿Es correcto combatir el calor con vinos fríos?
Pues a pesar de que la sensación de calor se va a aliviar de forma momentánea, hemos de decir que no es correcto. Las bebidas frías para combatir el calor lo que hacen principalmente es bajar de forma rápida la temperatura del cuerpo y éste va a activar el metabolismo para recuperar la temperatura de 37 grados constante que debe tener haciendo en muchos casos que la sudoración pueda ser mayor y la sensación de sed mayor.
Por lo tanto, a pesar de la sensación agradable que podemos sentir en el momento, lo ideal para combatir el calor es tomar un vino a temperatura ambiente que no necesite reactivar nuestro cuerpo para elevar de nuevo la temperatura.
¿Influye el color a la hora de beber vino cuando hace calor?
A pesar de que no lo hemos podido contrastar de forma científica, todos los wine lovers con los que hemos hablado de este tema coinciden que el color de los vinos blancos y rosados es muy atractivo en épocas estivales.
La sensación de frescor de estos vinos es mayor que la que producen los vinos tintos y es por ello que la elección si puede verse afectada por el color del vino.
En resumidas cuentas, que los vinos blancos y/o rosados son perfectos para calmar el calor del verano debe ser tomadas con precaución y lo ideal para combatir el calor es catar o degustar un vino a temperatura ambiente para no bajar de forma extrema la temperatura del cuerpo.
Eso sí, para gustos, los colores y como siempre, si tomar un vino frío es la solución para combatir el calor en verano, nadie podrá decirte que es una mala decisión.
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